04/08/2025
Con el apoyo de la Unión Europea Perú y Ecuador han puesto en marcha un centro de cooperación policial y migratoria en Tumbes con el objetivo de fortalecer la seguridad regional de ambos países.
La creación del Centro de Cooperación Policial y Migratoria (CCPM) ha sido un paso decisivo para fortalecer la seguridad regional de Perú y Ecuador, una iniciativa conjunta que se pondrá en marcha en las instalaciones del Centro Binacional de Atención en Frontera (CEBAF) de Tumbes. Un acto que se enmarca en el proyecto sobre la lucha contra el tráfico ilícito de drogas y el crimen organizado en Perú, y es promovido conjuntamente con el programa EUROFRONT.
El nuevo CCPM será un punto estratégico para el intercambio de información e inteligencia policial y migratoria, facilitando una respuesta rápida, coordinada y eficaz frente al crimen organizado transnacional que afecta a ambos países, especialmente en la zona fronteriza. Y funcionará como un mecanismo de coordinación interinstitucional, involucrando tanto a las fuerzas del orden como a las autoridades migratorias de Perú y Ecuador.
Tumbes ha acogido el encuentro con la participación de delegaciones de ambos países, representantes de la Unión Europea, y especialistas internacionales. Las actividades incluyeron mesas técnicas binacionales, presentaciones de modelos europeos y latinoamericanos de cooperación fronteriza, así como la elaboración conjunta de propuestas operativas para la puesta en marcha del CCPM.
El objetivo principal de esta reunión ha sido potenciar el campo de actuación del CEBAF de Tumbes para que evolucione hacia un modelo similar al de los Centros de Cooperación Policial y Aduanera (CCPA) de la Unión Europea. Esta transformación permitirá el intercambio de datos en tiempo real, la planificación de operaciones conjuntas, y la integración tecnológica para una vigilancia fronteriza más eficiente.
En sus intervenciones, las autoridades han destacado el compromiso firme de ambas naciones y de la Unión Europea con la lucha contra el crimen organizado transnacional, reconociendo que solo mediante una cooperación efectiva, articulada y sostenida será posible desmantelar las redes criminales y proteger a la ciudadanía.
Con esta implementación, Perú y Ecuador reafirman su voluntad política de actuar unidos frente a las amenazas comunes, transformando la cooperación internacional en una herramienta real y operativa para garantizar la seguridad y el bienestar de sus poblaciones.